martes, 27 de abril de 2010

SALVE REGINA


Salve, Regina, mater misericordiae;
vita dulcendo et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules, filii Evae.
Ad te suspiramus,
gementes et flentes in hac lacrimarum valle.
Eia ergo advocata nostra,
illos tuos misericordes oculos ad nos converte.
Et Iesum, benedictus fructus ventris tui,
nobis post hoc exsilium ostende.
O clemens, O pía,
O dulcis Virgo María.

V/ Ora pro nobis Sancta Dei Genitrix.
R/ Ut digni efficiamur promissionibus Christi
Oremus:
Omnipotens sempiterne Deus, qui gloriosae Virginis Matris Mariae Corpus et animam, tu dignum Filii tui habitaculum effici mereretur, Spiritu Sancto cooperante, praeparasti: da, tu cuius conmemoratine laetamur: eius pia intercessione , ab instantibus malis, et a morte perpetua liberemur. Per eumdem Christum Dominum nostrum.
Amén.

jueves, 15 de abril de 2010

http://www.scribd.com/doc/11125221/Plan-de-OrientaciOn-y-AcciOn-Tutorial

lunes, 5 de abril de 2010

RESUCITÓ

Feliz Pascua de Resurrección

EL CIRIO PASCUAL


El cirio pascual representa a Cristo resucitado, vencedor de las tinieblas y de la muerte, sol que no tiene ocaso. Se enciende con fuego nuevo, producido en completa oscuridad, porque en Pascua todo se renueva: de él se encienden todas las demás luces.

El encender el cirio es, pues, un memorial de la Pascua. Durante todo el tiempo pascual el cirio estará encendido para indicar la presencia del Resucitado entre los suyos. Toda otra luz que arda con luz natural tendrá un simbolismo derivado, al menos en parte, del cirio pascual.
El Cirio Pascual se bendice por medio del bellísimo cántico llamado el Pregón Pascual: «Exsultet». Es la primera palabra que sirve de título de la oración cantada por un diácono mientras bendice el Cirio Pascual.

Esta oración se atribuye a San Agustín y se usa desde el siglo VII. Este himno es la culminación de esta «Fiesta de Luz» es el anuncio oficial de la Resurrección.

Se canta la presentación y misterio de esta noche santa y con ella la gran gesta redentora de Cristo. «Esta noche que separa por todo el mundo a los que creen en Jesucristo, de los vicios y de las tinieblas, de los pecados, los restituye a la gracia y los agrega a la sociedad de los Santos... Hoy se une lo celestial con lo terreno, lo divino con lo humano».

Así ha quedado bendecido el Cirio Pascual; símbolo de Cristo que ilumina al mundo con el brillo de su divinidad, evidenciada con su Resurrección.
La cera con que está fabricado, simboliza su divinidad; el pabilo, su humanidad y los cinco granos de incienso que se elevan en él, los estigmas de Cristo.